
La zancada, es un ejercicio muy completo y fácil de incluir en cualquier rutina femenina. Es ideal para trabajar los glúteos y las piernas, y ayuda a mejorar el equilibrio y la coordinación. Puedes hacerla en casa o en el gimnasio, sin necesidad de material.
¿Cómo se hace la zancada?
- Ponte de pie, con los pies juntos y la espalda recta.
- Da un paso largo hacia adelante con una pierna, bajando la cadera hasta que ambas rodillas formen un ángulo de 90°. La rodilla de atrás debe acercarse al suelo, pero sin tocarlo.
- Mantén el torso erguido y los hombros relajados.
- Empuja con el talón del pie delantero para volver a la posición inicial.
- Alterna las piernas en cada repetición.
Consejos técnicos
- Mantén la mirada al frente y el abdomen apretado.
- El paso debe ser largo, pero siempre controlado.
- La rodilla delantera no debe sobrepasar la punta del pie.
- Si quieres más dificultad, puedes sostener mancuernas o botellas de agua en las manos.
Errores comunes
- Dejar que la rodilla delantera se desplace hacia adentro o hacia afuera.
- Inclinar el torso hacia adelante o curvar la espalda.
- Dar pasos demasiado cortos o demasiado largos, perdiendo el equilibrio.
- No apretar los glúteos al volver a la posición inicial.
La zancada es perfecta para esculpir y fortalecer los glúteos, y además te ayuda a mejorar tu postura y estabilidad. ¡Inclúyela en tu rutina y siente la diferencia!